Cuando conocí a novio Jay, estaba en uno de los peores períodos de mi vida, él sabía perfectamente que estaba rota sin posibilidad de reparación y tenía miedo de que él no me amara por el desastre que era. Pero nunca me juzgó. Simplemente me abrió mucho más sus brazos y me abrazó con mucho más fuerza. Nunca me vio como yo me veía a mí misma, fue todo lo contrario, me convenció de que era alguien a quien valía la pena amar; me convenció de que tenía buenas cualidades dentro de mí, que no era un fracaso ni un desastre, y que había logrado muchas cosas por mi misma de las que él estaba orgulloso. Vio algo en mí que yo nunca vi en mí misma y nunca juzgó la forma en que desgarré mi propia autoestima.
Vivir con un complejo de inferioridad y baja autoestima es más que difícil. Todo el tiempo están esos pensamientos en tu cabeza susurrando: «No eres lo suficientemente buena», «No eres suficiente» «Estás gorda», «No eres bonita», «¿Cómo alguien como él se va a fijar en alguien como yo». Pero algo muy muy mágico pasó y él llegó para silenciar esos pensamientos aceptando completamente la forma en que yo era y la forma en que me veía a mí misma. Para él nunca soy muy clingy o muy needy; en realidad no sé cómo me vean sus ojos, pero estoy segura de que no me ve como yo solía verme a mi misma y eso, eso, me hace sentir muy bonito dentro de mi ser. Eligió verme con compasión y empatía en lugar verme con todas las cualidades negativas que veía y odiaba en mí. Puedo acudir a él para cualquier cosa porque no me critica y no intenta cambiar nada en mí, valida mis sentimientos, aunque sean estúpidos. Estoy muy muy segura de que me ama incondicionalmente por lo que soy y no por lo que él quiere que sea como ya me pasó.
Todo esto, para mi, es el verdadero significado del amor. Cuando ves a alguien en un estado vulnerable, cuando está cabisbajo y sus ojos miran hacia abajo por la vergüenza de quiénes son, es cuando los amas con más fuerza. Cuando me avergüenzo de ser simplemente yo misma, me murmura al oido «Te amo por ti» cuando estamos juntos y cuando no, me lo escribe. Se siente paz, se siente relajante, reconfortante, calmante… no sé, ¡se siente tan bien! Siempre antes de dormir, me manda un audio diciendo algo, lo que sea, porque sabe que su voz y todo él me da calma y sus palabras, aunque me esté cantando «Baby shark» son lo que me mantiene en los días difíciles.
Sigo trabajando en mi amor propio, todos los días hago algo relacionado con cultivar mi amor propio y relacionado al self-care. Definitivamente no es un trabajo fácil ni de un día para otro, me ha llevado AÑOS, llegar hasta donde estoy ahora, sanando mis heridas y sintiéndome cómoda conmigo misma; definitivamente no soy una obra maestra perfecta, pero él me ama a pesar de eso. A pesar de mis imperfecciones, demostró total aceptación. Nunca olvidaré cómo me hizo sentir porque me enseñó a amarme, que está bien ser vulnerable, que está bien hablar sobre tus peores partes o momentos con alguien y no sentir vergüenza por ello. Que está bien estar en ese proceso de amarte a ti misma y que al mismo tiempo alguien te ame.
Si algún día esto se acaba, además de sentirme devastada, estaré muy arrepentida de haberle puesto un peso que él no tenía que cargar, teniendo que apoyarme, tranquilizarme y consolarme constantemente. Podría haber sido mucho más feliz con otra persona más madura y estable emocionalmente, y sin embargo, todavía nos elegimos el uno al otro. A veces siento Pero tanta culpa por hacerle pasar por todo lo que no se merecía, por hacerlo sentir agobiado por mis problemas.
Intento todos los días de mi vida darle todo el mundo porque novio Jay se lo merece, y a veces siento que se merece mucho más de lo yo puedo ofrecerle, sin embargo, eligió amarme a pesar del desastre que soy.