Hoy les quiero escribir sobre autoestima y amor propio porque este fin de semana estuve en una conferencia super interesante con una psicóloga in-cre-í-ble, Paola Lavín. Además, porque muchas veces hemos confundido ambos términos o los usamos como sinónimos, me incluyo, y no es así. Creo que es importante que conozcamos esto porque muchas veces creemos que ser arrogantes o seguras de nosotras mismas significa que tenemos un autoestima muy alta o que nuestro amor propio es muy grande y pues no, para nada es así.
Pero para empezar con este tema, quiero enseñarles primero la Pirámide del Autoestima y sus componentes:
Autoconocimiento
Es comprender y reconocer quienes somos, es el proceso inicial para aprender a valorarnos. Lo definimos como la capacidad de introspección que tiene una persona para reconocerse como un individuo y para diferenciarse de los demás; es decir, qué es lo que yo sé de mi que me hace yo y que me hace diferente a todos los demás. Este concepto responde a las preguntas:
- ¿Quién soy?
- ¿Por qué actúo de esta manera?
- ¿Por qué creo lo que creo?
- ¿Por qué pienso lo que pienso?
- ¿Qué cosas me gustan de mi y por qué?
Autoconcepto
Es el conjunto de percepciones e ideas de lo que creemos que nos define (aspecto físico, emocional, social y profesional y/o académico). Es la imagen mental que hemos creado sobre nosotras mismas. No solamente es una imagen visual o física sobre cómo creemos que es nuestro cuerpo, sino que se trata de un conjunto de ideas y creencias que creemos nos definen (roles, imagen física y todo lo que creemos que somos).
Este punto responde a las siguientes preguntas:
- ¿Qué pienso sobre mí misma?
- ¿Cómo me veo a mí misma? ¿Cómo creo que los demás me ven?
- ¿Qué creencias tengo de mi misma?
- ¿Cómo te describirías a ti misma?
Toda esta serie de creencias impacta en nuestro autoconcepto porque “quien se cree tonto, actuará como tonto aunque no lo sea”. Las creencias son muy fuertes porque son lo que nos decimos todos los días y si nos hablamos de manera despectiva, negativa o catastrófica nos la vamos a empezar a creer porque es lo que nos decimos a nosotras mismas.
Autoevaluación
Es el proceso de reflexión que nos permite identificar las propias fortalezas y debilidades. Es la capacidad interna de evaluar las cosas como buenas (que nos permiten crecer, que nos gustan o que nos satisfacen) o como malas (que hacen daño y no nos permiten crecer) desde nuestra perspectiva.
También podemos decir que es la evaluación que nosotras hacemos de nuestros conocimientos, aptitudes y características en relación con quienes me rodean; es como esa autocrítica que hacemos de nosotras mismas y decidir si eso es bueno o malo para nosotras.
Un ejemplo de este concepto son las redes sociales, todos nos llegamos a comparar con lo que vemos ahí y es normal todo el mundo lo hace, sin embargo cuando lo hacemos constantemente con algo que nos causa inseguridad, puede llegar a dominarnos y hace que nuestro diálogo interior sea negativo y es cuando se vuelve no saludable.
Autoaceptación
Es la capacidad que tenemos para tomar todo lo que nos gusta y lo que no nos gusta de nosotras mismas y aun así aceptarnos. Es la capacidad de tomar todo eso que nos gusta de nosotras mismas, lo que no nos gusta tanto y aún con ello aceptarnos, mas no resignarnos; es decir, eso que aunque no me gusta tanto de mi, ha sido importante en mi vida por el rol que ha jugado en ella y porque me ha traído hasta donde estoy ahorita.
Es un trabajo de todos los días y que se trabaja siempre y cada día que trabajemos con esto vamos a estar más cerca y a gusto con quien somos sabiendo que hay cosas que queremos trabajar y estamos en proceso de hacerlo.
No tenemos que ser perfectos para aceptarnos como somos, eso que no nos gusta de nosotras es precisamente lo que nos hace ser nosotras. Somos un trabajo en proceso, necesitamos de tiempo, paciencia y autocompasión.
Distorsiones cognitivas. Es cuando nos hablamos con un vocabulario perfeccionista muy rígida que no da espacio a errores y si nos hablamos de esa forma, va a ser mucho más difícil aceptarnos:
- Yo debo ser
- Yo debo hacer
- Yo debo tener
Esto no sólo lo hacemos para nosotras mismas sino para los demás también, pues creemos, por ejemplo, que si yo llego temprano, todos los demás también deberían hacerlo. Son los deberías en nuestra vida.
Autorespeto
Es el respeto que nos otorgamos a nosotras mismas, aquí viene todo esto de la capacidad que tenemos para decir no y fijar límites sanos en nuestra vida. Es el respecto que nos otorgamos a nosotras mismas. ¿Cómo? Aquí entran en juego los limites: aprender a decir que “no”, no es egoísmo, es amor propio, es simplemente respetar nuestros deseos y necesidades. Al poner límites estamos validando y tomando a consideración nuestros propios sentimientos.
Autoestima
El autoestima es distinto al amor propio. Es la valoración o juicio que hacemos de nosotras mismas. Es la suma de todos los conceptos anteriores; el nivel de autoestima que tenemos nos dice qué tan satisfechas estamos con quienes somos como personas. El autoestima es la suma de todos los conceptos anteriores, la podemos definir como la valoración o el juicio que hacemos de nosotras mismas; es la reputación que tenemos de nosotras mismas.
El nivel de autoestima que tenemos es un indicador que nos dice que tan satisfechos estamos con quienes somos como personas. Esta va cambiando con el tiempo, es modificable; la autoestima es un proceso donde los acontecimientos diarios influyen, va cambiando dependiendo de los acontecimientos que nos pasan día a día.
El autoestima es la suma de un conjunto de juicios y opiniones que hacemos acerca de nuestro propio valor y competencia en diferentes dominios; es la combinación de qué tan competente me creo en algo y que tanto creo que valgo. Es en parte una causa de los acontecimientos que vivimos y también consecuencia de ellos.
El amor propio es el sentimiento de cariño y amor que nos tenemos a nosotras mismas. Este se ve reflejado en la intención con la que hacemos las cosas en el día a día. Ejemplo:
Persona 1: Hace ejercicio porque quiere cuidarse, quiere tener más energía y mejorar su estado de ánimo. Persona 2: Hace ejercicio porque odia su cuerpo, no aguanta verlo y necesita cambiarlo para poder amarlo y sentirse bien.
La persona 1 refleja amor propio, mientras la persona 2 está llena de comparaciones, inseguridades y odio propios; todos podemos presentar eso, simplemente es importante revisar que la intención con la que hacemos las cosas impacta en como nos sentimos y nos hablamos a nosotras mismas.
Para poder trabajar en nuestro amor propio hay que preguntarnos ¿con qué intención hago lo que hago? A simple vista, una acción puede ser la misma, pero el background con lo que lo hacemos impacta positiva o negativamente en nuestro discurso interno
La regla de oro del amor propio es: La intención con la que hacemos las cosas debe venir desde el amor, el cariño y el cuidado.
Además de seguir la regla de oro, hay que saber que nos gusta más. Esto lo podemos identificar con lo que Gary Chapman decía en su libro “Los cinco lenguajes del amor”:
- Tiempo de calidad (meditar, tener un hobby, tener tiempo para mi, etc.)
- Actos de servicio (salir a divertirse, ir a terapia, etc.)
- Contacto físico (ejercicio, masajes, días de spa, etc.)
- Regalos (invertir en nosotras mismas, viajes, ropa, etc.)
- Palabras de afirmación (Journaling, hablarte bonito, mantras, etc.)
Otros tips para practicar el amor propios:
- Autocuidado. Son las acciones que vimos en los lenguajes del amor.
- Autocompasión. Es darnos el beneficio de la duda cuando nos equivocamos; cuando nos demos cuenta que estamos siendo muy rudas con nosotras mismas, hay que preguntarnos ¿qué le diría a un amigo si esto le estuviera pasando a él/ella?
- Introspección. Es la reflexión personal que hacemos para conocernos, procurarnos y cuestionarnos
El amor propio no es egoísmo, es simplemente poner nuestras necesidades antes que los deseos y caprichos de otras personas. El egoísmo por el contrario, es poner nuestros caprichos y deseos antes que las necesidades de otras personas.
Mi vida con Macaco 