Hace varios meses les conté que estaba en este camino mágico, místico, espiritual y que estaba formándome en distintos temas como manejo de energía con Brenda, runas con Ere y magia verde con Mar, entre otras cosas que se han agregado en los últimos meses. También les contaba que en este proceso conocí mujeres increíbles, inteligentes y que de verdad admiro demasiado; bueno, recientemente tuve una pequeña reunión con un par de ellas para echar el chisme porque ya somos amigas, ¡yay! La verdad es que iba a ser una reunión bien normal, de amigas para comer, tomar vinito, una tabita de quesos, chismecito, hablar de la vida y demás cosas normales que hacemos con nuestras amigas, pero esta reunión normal, se volvió un poco mágica y paranormal, lol!
Bueno, resulta que Mar, Fer y yo nos quedamos de ver en casa de Mar porque recién se había mudado a la Ciudad de México y nos iba a enseñar su estudio; le íbamos a ayudar a pintar, decorar y acomodar y pues sí, así fue. Al terminar ya nos sentamos a comer y echar chisme más a gusto; nuestra platica empezó normal hasta que Mar nos empezó a contar que se había sentido bien baja de energía y que había estado viendo cosas en su nueva casa… y pues a partir de aquí nos salió lo brujas y no pudimos evitar ser «normales» como lo habíamos planeado, lol.
Para no hacerles el cuento largo, Fer y Mar son expertas en estos temas, entonces yo sólo me quedaba callada, escuchaba y aprendía de todo lo que estaban diciendo. Honestamente, a mi todo este tema de sentir la energía de las personas me resulta muy muy abrumador y es un «don» que no quiero tener, porque implica sentir todo, absolutamente todo, de las personas con quien te estas conectando (sus miedos, sufrimientos, alegrías, tristezas, todo); y pues con muchísimo trabajo apenas puedo lidiar con todo lo mío, ahora súmenle lidiar con toda la intensidad de otra persona en un lapso corto de tiempo, no, no, no, yo me muero de la ansiedad que causa (well, not! Pero sí se siente feo).
Pues parece que hice enojar mucho a Fer porque me dio tremendo sermón. Me dijo que yo no podía renunciar a ese «don» que me habían dado y que debía trabajar en mi para poder controlarme y no personalizar todas las energías que no me pertenecían a mi… Honestamente no me gusta sentir eso, de verdad se siente horrible y paso, no quiero volver a hacer y experimentar eso en mi ser nunca más… Fer es una buenaza en estos temas, lo suyo es el manejo de energías porque además es médium (ahora saben porqué me dio tremenda regañiza).
En su intento por ayudarme con ese «don», Fer me hizo una canalización astral y pues además de sacarme a relucir cosas que me tenía bien guardadas y no quería que nadie se enterara sobre ciertas situaciones y sentimientos (¡Pinche Fer!), me dijo otras cosas que ya sabía, pero como que no le presté la suficiente atención y no le di mucha importancia. Esta canalización fue más como para sacar a la luz aspectos de mi personalidad con los que no estoy muy conectada o que he ignorado consciente o inconscientemente por muchas razones, un par de ellas fue este tema de tener una personalidad empática (que ya había hablado con mi psicóloga) y ser sensible a emociones, sentimientos y, Fer, le añadió energías; y, que también tengo una personalidad protectora y defensora muy muy fuerte.
Fer me dijo una frase que se me quedó super gravadísima en mi ser: «Cuando tú cuidas y proteges, se nota y se siente. Cuando dejas de hacerlo se nota y se siente aún más». Y es que ¡si es cierto! o sea, ya lo sabía, porque sí tiendo a ser es persona que cuidad y defiende a las personas que quiero y cuidadito y me las lastimen; pero no sabía que también lo hacía a un nivel energético que me drenaba mucho y que no sé manejar.
Fer me decía que aunque era una persona muy sensible era super fiera cuando era necesario proteger a los míos; que aunque soy callada y tímida, he desarrollado esa habilidad de tratar con la gente y tener relaciones sociales sólidas; y que aunque busco seguridad y estabilidad, soy muy receptiva a los cambios siempre y cuando me sienta comprendida al respecto y respetada. Me decía también que tendía a ser muy altruista, que respondía a la gente según me tratara y que era muy comprometida con mi trabajo y las causas y personas en las que creo.
En esta canalización, también me decían que tendía a ser alborotadora y rebelde, pero tan meticulosa al punto del perfeccionismo, y que a pesar de posponer las cosas, siempre se puede confiar en que terminaré mi trabajo a tiempo, porque siempre voy un paso más allá y hago todo lo posible por superar las expectativas y complacer a los demás. Algunas de las cosas no tan cool de esto es que tiendo a subestimar mis logros, dejo que la gente se aproveche de mi corazoncito de pollo y que luego otros terminan apropiándose de mis logros, que debo saber plantarme y así como defiendo a los demás, defenderme a mi misma.
Fortalezas: Me gusta ser un apoyo, y comparto lo que puedo con quien lo necesite, especialmente si hay un vinculo afectuoso de por medio. Soy la persona más confiable porque además de mantener mis lealtades en lo que creo y en quien creo, me aseguro de que las cosas se hagan al más alto nivel y un poco más. Me gusta observar las emociones y sentimientos de los demás para poder ayudar a las personas y hacer una diferencia en sus vida. Siempre veo lo bueno en los demás, lo cual me puede resultar contraproducente al llegar a un punto de la idealización.
Debilidades: Al estar tan enfocada y preocupada por los demás, me niego a ver por mí misma y a aceptar y apropiarme de mis propios logros; pongo estándares tan altos en mi misma que llego a minimizarme y castigarme muy duro si fallo en algo, por más pequeño que pueda ser. Me tomo todo muy personal, tengo problemas para separar situaciones personales e impersonales y cualquier crítica suelo tomármela muy personal. No hago por mi lo que haría por otros, lo cual incluye cuidar de mis propios sentimientos. La sobrecarga de trabajo que me infrinjo yo misma y mi renuencia al cambio, es una combinación mortal al incluir esta personalidad tan altruista porque en este afán de ayudar a otros, no me cuido a mi misma y dejo que mis problemas aumenten y no suelo pedir ayuda.
Con la canalización de Fer, también me dijo que soy alguien con muy buena memoria, pero no precisamente para retener datos o trivialidades, más bien para recordar personas y detalles de sus vidas que para mi resultan ser un diferenciador en ellas. Cuando doy regalos, soy inigualable y más que cuestiones materiales, me enfoco en esos detalles que llegan al corazoncito de las personas.
En temas de trabajo, no me siento cómoda siendo el centro de atención y en una posición de liderazgo en mi equipo, puedo llegar a sentirme culpable por el reconocimiento al trabajo y los esfuerzos del equipo, que siempre voy a procurar que se le de el reconocimiento a quien lo merece.
En temas de relaciones románticas, cuido y protejo mucho al novio, que siempre estoy ahí para ser apoyo emocional y práctico cuando sea necesario. Me esfuerzo mucho en mantener un vínculo sólido y duradero y le pongo mucha dedicación a la relación y al novio. Dice Fer que soy de las que «quiero bonito», pero que también no todos son dignos de ese «amor bonito» que tengo para dar y que no todos lo entienden. Me tomo muy enserio mis citas y no me meto en relaciones que no tienen una oportunidad real de durar toda la vida.
Por fuera puedo parecer alguien fuerte, pero es un mecanismo de protección para que no lastimen todo ese mundo sensible que llevo dentro de mí. Valoro muchísimo el compromiso, al grado, o con la intensidad de lo que otras personas lo hacen con sus creencias religiosas. Tengo miedo al daño emocional y en el momento de que empiezo a sentir eso, o me alejo, o me quedo a tratar de arreglar las cosas. Me cuesta mucho expresar mis sentimientos y emociones con el novio, pero nunca dejo pasar la oportunidad de demostrar mi amor a través del afecto físico. Y como buena persona complaciente, esto también lo llevo a la intimidad y en temas de sexo, suele ser muy bueno; aunque también lo reflejo con la enorme cantidad de tiempo y energía que utilizo encontrando maneras de mantener mi relación bajo los preceptos de compromiso, amor y lealtad.
Le pedí a Fer que ahondara más en temas de relaciones porque justo es lo que más problemas me había traído y pues ahora que estoy con Jay, es alguien super importante para mi, y la verdad, no quiero que termine nunca, por lo increíble que se siente estar con él. Fer me decía que no todos iban a ser capaces de aceptar ese lado protector mío y que iban a ser muy críticos conmigo, y que si no están preparados emocionalmente para hablar de ello, eso iba a terminar en emociones reprimidas estallando en ataques verbales masivos y mucha violencia psicológica (lol, eso ya pasó). Por otra parte, también iban a estar quienes se aprovecharan de mi corazón de pollo y probablemente yo ni cuenta me iba a dar (lo, también ya pasó). Que básicamente, buscaba relaciones de equilibrio, apreciación mutua y establecimiento de metas, que todos estos factores eran bien importantes para mi; soy una persona muy confiable, leal, fiel y amorosa y que eso es lo que esperaba también en reciprocidad.
Honestamente, y aunque llevo ya un tiempo metida en estos temas, estaba voladísima por la precisión y el detalle que Fer sacó a la luz de mi y todo mi mundo interno. Me dijo otras cosas, pero, esas si me dan un poco de vergüenza mencionarlas aquí (aún no estoy preparada para contárselas) pero todo lo que me dijo esa bitch fue tan exacto que de verdad da miedo, sabe más de mi que otras personas mucho más cercas, e incluso que yo misma, lol.
En fin, la pregunta principal ahora era ¿cómo chingados le hago para aceptar todo esto que me ha dicho Fer y trabajar con ello para «hacer el bien»? De nuevo regañiza, porque me dijo que no todo debía ir enfocado en «ser buena», que todo tiene un equilibrio y no debo ocultar esa oscuridad que también hay en mi. Lo que debía aprender y de manera urgente es que así como protegía a todo el mundo a mi alrededor, debía aprender a protegerme, y defenderme, sin miedo, de los ataques en mi contra o de cualquier energía que quiera perjudicarme. Que recordara muy bien que la defensa no era venganza y que no me sintiera mal por protegerme a mi misma.
Más allá de que yo termine por creer o no al 100% o no estos temas bujiles (porque he tenido varias experiencias donde no encuentro ninguna explicación lógica y hay otras veces que algunas cosas me parecen una reverenda estupidez), la cuestión principal para mi es ¿cómo aprender a defenderme y protegerme sin sentirme mal por ello? y ¿qué hacer cuando has protegido a la gente equivocada, pero te sientes mal si dejas de hacerlo? Poniendo límites, ok, check… ¿luego? ¿cómo lidio con mi corazón de pollo y ese sentimiento de que va a pasar algo malo con las personas a quien dejas de proteger o no debes hacerlo?
Es algo que llevo tratando de averiguar en terapia y de verdad, mi cabecita aún no termina de entender al mi estúpidio corazón de pollo, es como una lucha interna que he estado posponiendo por muchísimo tiempo porque simplemente no sé cómo resolver internamente… y honestamente es un tema que voy a evadir hasta que ya no haya otra opción, porque por el momento estoy muy cómoda y feliz así, y hace muy tiempo no sentía eso y voy a alargarlo el tiempo que más se pueda… I deserve it!
Mi vida con Macaco 